BERLÍN
¿Dónde
está?
Se sitúa al noreste de
Alemania, a unos 70 km de la frontera con Polonia. Es la capital de la República Federal de
Alemania y la ciudad más poblada del país. Dos ríos pasan por ella: el Spree y
el Havel. En la zona más estrecha del Spree se encuentra el centro histórico de
la ciudad. Este río desemboca en el Havel.
¿Cuándo
ir?
Teniendo en cuenta el clima,
quizá la mejor época para viajar a Berlín sea entre mayo y octubre, aunque como
el tiempo es variable debes ir preparado para cualquier cambio.
¿Cómo
ir?
Puedes ir por aire o por
tierra. Berlín cuenta con tres aeropuertos. Es frecuente hacer escala en otra
ciudad como Frankfurt, París o Londres y desde allí coger otro vuelo. Para
desplazarte a la ciudad desde cualquiera de los tres aeropuertos puedes coger
un autobús o un tren, no tendrás que recurrir a un taxi.
Berlín también está muy bien
comunicada vía carretera ya que dispone de una amplia red de autobuses de larga
distancia.
El coche es otra opción.
Además luego podrás trasladarte a otras ciudades. El cinturón de carreteras A10
une Berlín con otras ciudades tanto alemanas como extranjeras.
Y si lo que te gusta es
viajar en tren, debes saber que tu tren puede sufrir algún desvío provocado por
las obras que se están llevando a cabo en la ciudad.
¿Qué
ver?
Nuestra primera parada es la plaza de París, Pariser Platz, una de las más bonitas
de la ciudad. Está formada por construcciones singulares como la casa
Liebermann y la Sommer, pensadas como edificios gemelos, el Dresdner
Bank, el hotel Adlon, la Academia de Arte, las embajadas de EE.UU. y Francia y
destaca especialmente la
Puerta de Brandenburgo.
La Puerta de
Brandemburgo es uno de los lugares más emblemáticos de Berlín, por ser
símbolo de la reunificación de Alemania. Arquitectónicamente es uno de los
ejemplos más importantes del clasicismo alemán. Fue construida en 1791 por el
arquitecto Carl Gotthard Langhans con la intención de que simbolizara la paz. Posteriormente
se le añadió en la parte superior una cuadriga y paso a ser un monumento en
honor de la fuerza prusiana. En 1961 se construyó el muro y la puerta se quedó
en tierra de nadie.
Tras la caída del muro en 1989, toda esta zona fue
abierta al público. Actualmente la plaza está llena de puestecillos y en ella
es fácil encontrar vendedores que te ofrecen todo tipo de recuerdos militares y
también pedazos de lo que ellos dicen es el muro de Berlín.
Dicen que si recogieran todos los pedazos de muro que
se han vendido a los turistas, se podría amurallar no solo Berlín sino Alemania
entera, así que desconfía de este suvenir.
El
muro de Berlín
La
construcción del muro de Berlín tuvo lugar en 1961, el Ejercito Nacional
Popular cercó las calles y los ferrocarriles en dirección a Berlín Oeste. Tras
la autorización del gobierno de la ya desaparecida República Democrática Alemana (RDA), se edificó el Muro. Un muro de
hormigón de 47 km de largo, 4 m de alto
y un perímetro de 160 km, que no solo supuso la separa cientos de
familias sino también la del mundo en dos bloques: uno bajo el dominio
capitalista (Berlín Oeste bajo control
de EUA, Reino Unido y Francia) y otro dominado por el comunismo (Berlín Este, bajo control soviético).
El 9
de noviembre de 1989 se inició la destrucción del Muro, que había separado la
ciudad durante casi 30 años, concretamente 28. Berlineses de ambos lados del
Muro se echaron a la calle. Las primeras
personas que empezaron a derribarlo lo hicieron a golpe de pico, martillo y
cincel en plena noche. Otros con sus propias manos. El muró cayó en un abrir y
cerrar de ojos, aunque todavía se conservan algunos tramos, como testimonio de
la historia de Alemania. En Mühlenstrasse
hay uno de algo más de 1 km. La desaparición del Muro llevó consigo la reunificación de Alemania.
En
2006, se reabrió el Museo Histórico
Alemán (“Deutsches Historisches
Museum”) con una exposición sobre la historia alemana a través de la
caída del Muro.
Otro lugar emblemático es Checkpoint Charlie, escenario de novelas y películas
de espionaje como "Octopussy" con James Bond. Este puesto fronterizo
interno fue creado en 1961. Aquí los vigilantes aliados registraban a los
miembros de las fuerzas armadas británicas, americanas y francesas antes de que
entraran en el Berlín Este. Una instalación del artista Frank Thiel y una placa
recuerdan hoy en día el antiguo paso fronterizo.
Junto Checkpoint Charlie hay un museo dedicado a la
historia del muro y a los que intentaron cruzarlo, Museo del Muro del Checkpoint Charlie. Tiene una galería en la que se exhiben
artilugios que se utilizaron para in tentar escapar de la Alemania del Este.
También se pueden visitar los viejos cuarteles de la Stasi, las fuerzas de
la Policía secreta de la RDA (República Democrática Alemana), que están en los
suburbios de Berlín Este.
Pero volvamos a la Puerta de
Brandemburgo y la Pariser Platz.
A muy pocos metros de la Puerta de Brandemburgo, 2.711 bloques de hormigón
mantienen en la memoria el Holocausto judío.
En la plaza de París empieza
el principal paseo de Berlín, “Unter den
Linden”, en la que se localizan espacios de interés cultural y turístico
como el Museo de Historia de Alemania (“DHM”), en cuya entrada está el lema
utilizado en las movilizaciones que condujeron a la caída del muro: “Somos una
nación” (“Wir sind ein Volk”)
Volviendo a este gran paseo,
punto de reunión, fue inmortalizado por poetas como Goethe y Heine. También en
canciones como “Untern Linden, untern Linden” de Walter Kollo y que versionó
Marlene Dietrich.
Junto al paseo se encuentra
la plaza de Bebel (“Bebelplatz”), otra de las más bonitas de la ciudad. Esta
plaza paso a la historia el 10 de mayo de 1933, por un triste acontecimiento.
Aquí tuvo lugar la quema de libros ordenada por el ministro de propaganda
Joseph Goebbels. Se lanzaron a las llamas unas 20.000 obras de la literatura
universal, obras de escritores como Heinrich Mann, Erich Kästner, Kurt Tucholsky,
Karl Marx o Sigmund Freud.
En 1995 el artista israelí
Micha Ullman construyó un monumento subterráneo que recuerda este suceso. En
medio de la plaza, hay un panel de cristal y a través de él se puede ver una
biblioteca con las estanterías completamente vacías.
Caminando hacia la parte occidental de Berlín, en el
centro, se sitúa la plaza Potsdamer, una zona moderna con centros comerciales y
rascacielos. Al este del barrio de Postdamer Platz se encuentra el Kulturforum,
que es un centro cultural y artístico formado por un grupo de museos y salas,
entre los que se encuentran La Galería de Pintura, donde podrás disfrutar de
una gran colección de pintura europea con cuadros de los siglos XIII al XVIII,
el Museo de Artes Aplicadas y el Museo de Grabados y Pinturas. De entre las salas,
destacan la Sala de Música de Cámara y la Sala de conciertos Berliner
Philharmonie.
Berlín cuenta con una gran
orquesta filarmónica, “Berlin Philharmoniker”, integrada por 50 músicos
alemanes, y considerada una de las más prestigiosas del mundo tanto por la
técnica tan perfecta que tienen sus músicos como por los años de tradición.
Si nos encaminamos ahora al
Berlín Este, en su centro antiguo, podrás ver la Alexanderplatz, la más grande
de la ciudad. Durante la II Guerra Mundial fue destruida en gran parte. Es en
los años 60 cuando adquiere su aspecto actual. Después de la reunificación se
organizó un concurso público y el proyecto que ganó propone demoler gran parte
de las construcciones actuales y construir 13 rascacielos. Todavía no se ha
decidido si finalmente se llevará a cabo.
Próxima a esta plaza está la
torre de televisión (“Fernsehturm”) con una altura de 368 m, lo que hace que se
pueda ver desde casi cualquier parte de la ciudad. Fue construida en 1960. Está
considerada un monumento de Alemania con gran afluencia de turistas; al año,
más de un millón la visitan. Suben para
ver desde la plataforma panorámica, situada a más de 200 m, la vida de la
ciudad, el ajetreo en las calles. Y otra cosa que puedes hacer en las alturas
de la torre es comprar una camiseta, un poster o un cojín con la imagen de la
torre.
Sin salir de los alrededores
de la Alexanderplatz podemos visitar muchos otros monumentos y edificios
antiguos, entre ellos están el Ayuntamiento (“Berliner Rathaus”) y la catedral
de Berlín (“Berliner Dom”), que presentan una arquitectura singular.
Uno de los símbolos de la
ciudad es sin duda el Ayuntamiento. Se caracteriza por su fachada de ladrillos
rojos, origen del sobrenombre con el que se conoce el “Ayuntamiento rojo”. Se
trata de un edificio de estilo neorenacentista, con tres patios interiores y
una torre de 74 m de alto. Cuenta con varias salas. La más bonita, sin duda, es
la sala de las columnas (Säulensaal). Antiguamente era la sala de la
biblioteca. Actualmente se utiliza para exposiciones. En la sala de los
blasones (Wappensaal) hay escudos de los distintos distritos de Berlín. En esta
sala es donde se recibe sobre todo a los invitados estatales. Las recepciones se celebran en la
sala grande de fiestas (“Große Festsaal”). Y si quieres conocer a todos los
ciudadanos de honor berlineses, debes recorrer los pasillos del tercer piso
donde hay retratos de todos ellos.
Otro
de los símbolos de la ciudad es la Catedral de Berlín (“Berliner Dom”). Se
encuentra en la zona norte de la isla Spree. Originalmente se construyó en el
s. XV. En el s. XIX, los miembros de la dinastía Hohenzollern decidieron
construir una suntuosa catedral, pues pensaron que la que había era demasiado
modesta.
En
1905 se inauguró la nueva iglesia. Durante la II Guerra Mundial sufrió daños,
pero desde 1975 a 1993 se reconstruyó. De entre las zonas que presenta la
catedral destacan varias capillas (“Taufkirche” y “Traukirche”), la cúpula, el
museo de la catedral y el panteón de los Hohenzollern, en el que hay casi 100
féretros de cuatro siglos distintos.
La Isla de los Museos
Se
trata de un conjunto de 5 museos de prestigio mundial situado en el NO de la
isla del Spree. La riqueza, variedad e importancia de sus colecciones hizo que
la UNESCO lo declarara Patrimonio de la Humanidad en 1999. Estos museos son:
Museo
Bode
(“Bode-Museum”)
Presenta una gran colección
de esculturas (de la Edad Media al s. XVIII), joyas procedentes del Museo de
arte bizantino y piezas del Gabinete de Moneda y Medallas.
Museo
de Pérgamo (“Pergamonmuseum”)
Es el más visitado de
Berlín. Aquí se expone el friso del Altar de Zeus de Pérgamo, una de las obras
maestras del arte helénico. También se puede ver la reconstrucción de la Puerta
de Ishtar.
Museo
Antiguo
Se trata de un edificio
clasicista, diseñado en 1830. Fue el primer museo público de Prusia. Se
recostruyó en los años 60, después de su destrucción durante la guerra. Presenta obras que se mostraban en
Charlottenburg.
Antigua
Galería Nacional
Aquí se exponen obras del
Clasicismo, el Romanticismo, el Biedermeier, el Impresionismo y los primeros
contemporáneos. El edificio se construyó entre 1867 y 1876. Se reabrió en 2001,
siendo el primero de la Isla.
Museo
Nuevo (“Neues Museum”)
Data de 1841, en la guerra
quedó en ruinas y en 1999 se reconstruyó. En 2009 se reabrió. Alberga las
colecciones egipcias del Museo Bode y el Museo Egipcio de Charlottenburg.
Aquí se exhibe el retrato de Al-Fayum (retrato de Aline) y el
busto de Nefertiti, en madera
policromada.
Berlín tiene muchos museos. Fuera de la Isla de los
Museos, puedes visitar la Galería de Pinturas (“Gemäldegalerie”),
centrada en pintores del s. XIII al XVIII. Si prefieres admirar obras de la
pintura europea del s. XX debes visitar la Nueva
Galería Nacional (“Neue Nationalgalerie”).
Si quieres conocer más sobre la historia de Alemania,
visita el Museo de Historia, aquí
podrás ver uno de 23 bunkers subterráneos que quedan en la ciudad. Y también el
Museo Judío que ofrece una
exposición permanente de historia
germano-judía.
Si te apetece ver el esqueleto de dinosaurio más
grande del mundo, debes visitar el Museo Humboldt de Historia Natural.
Parques
La parte oeste de la ciudad cuenta con grandes
espacios verdes con zonas de ocio.
El principal parque de Berlín es el Tiergarten, que se encuentra en el
centro de la ciudad. Inicialmente fue una zona de caza luego paso a ser para el
uso de los berlineses.
En este parque está la Columna de la Victoria (“Siegessäule”), otro de los símbolos de la
ciudad. Popularmente se la conoce con el nombre del “asno de oro”. Conmemora
tres victorias alemanas en el siglo XIX: la victoria de Prusia en la guerra
germano-danesa de 1864; la guerra alemana contra Austria en 1866; y la guerra
contra Francia en 1870-1871.
Tiene
una altura de 69 m y en la parte superior
se sitúa una escultura de bronce de la diosa griega de la victoria,
“Nike”. Puedes subir hasta la cúspide y desde allí disfrutarás de una bonita
vista de la ciudad.
¿Cómo desplazarte por la
ciudad?
Berlín
tiene una gran red autobuses y trenes que llegan a cualquier rincón de la
ciudad.
Otra
forma de moverte es yendo en bici. Se puede alquilar una en cualquiera de las
muchas tiendas que hay dedicadas a este negocio. Para circular dispones de
carriles bici muy bien señalizados.
La
parte este de Berlín la puedes visitar en tranvía, hay más de 30 líneas que
cubren toda esta área.
Algunas
zonas, como el centro histórico es preferible que las visites a pie. Aquí
puedes ver, y tomar, un tipo de transporte bastante curioso. Son los
llamados Velotaxis, unos taxis a
pedales.
Y si
estás cansado y quieres coger un taxi con ruedas y motor, solo tienes que
acercarte a una parada de taxi. Algo que también resulta curioso es que en las
paradas hay una especie de interfono para llamar a un taxi, aunque resulta más
sencillo parar uno por la calle.
¿Qué comer?
Los
productos base de la gastronomía alemana son la patata, la col, el cerdo y,
como bebida, la cerveza.
Entre
los platos más típicos de Berlín están el codillo hervido (“Eisbein”), la
salchicha con salsa de tomate al curry (“Currywurst”) y la albóndiga gigante
(“Boulette”).
Los
platos son generosos, por lo que te recomendamos que pidas únicamente un
primero o un segundo.
¿Qué espectáculos ver?
Para
saber qué espectáculos puedes ver solo tienes que hacerte con uno de los tres
periódicos que informan sobre espectáculos. También puedes consultar los
“pirulís” para publicidad. Si quieres asistir a un musical o a la ópera,
consulta en los teatros.
Festivales
y conciertos
Berlín ofrece muchos
festivales, conciertos y fiestas a lo largo del año.
En febrero Berlín se viste
de magia y glamour para recibir el Festival de Cine, que es el segundo más grande del mundo. Este certamen se lleva celebrando desde 1951,
pero fue a partir de 1956 cuando adquirió carácter oficial. Un jurado
internacional es el encargado de decidir quién es el ganador del Oso de Oro y
quién el Oso de plata. El festival acoge a autores de todas las nacionalidades
y ha premiado a directores como Polanski, Pasolini, Bergman… También directores
españoles como Saura y muchos otros han conseguido el Oso de Oro. A Fernando
Fernán Gómez le fue concedido en reconocimiento a toda su carrera.
En el mes de junio tiene
lugar el Christopher Street Day, un gran desfile gay que transcurre por las
calles de la ciudad.
Y si te gusta el techno, no
te puedes perder el Love Parade que
se organiza en julio.
En septiembre un centenar de
autores se dan cita en el Festival Internacional de Literatura, donde comparten
con el público sus creaciones y opinan sobre temas de actualidad cultural y
política en los simposios organizados.
Si lo tuyo es la cerveza
nada mejor que visitar la ciudad en octubre y participar de la Oktoberfest. Hay cientos de puestos con
más de mil tipos de cerveza. Se ameniza la fiesta con espectáculos de música y
entretenimiento.
A primeros de noviembre se
celebra el Festival de Jazz,
“Jazzfest”, un festival que desde hace 40 años reúne a numerosos artistas
internacionales y ofrece un gran número
de conciertos para deleite de los amantes del jazz.
Si prefieres viajar en
Navidad podrás disfrutar de los Mercados
de Navidad. Visita el mercado de Navidad nostálgico. Está ante el palacio
de la Ópera, en el gran paseo Unter den Linden. Pasea por el mercado, toma un
poco del famoso vino caliente (“Glühwein”) para entrar en calor y compra regalos
originales hechos por artesanos y artistas.
Curiosidades
Alguna
curiosidad de la ciudad de Berlín es que en casi todos los distritos hay una
piscina. Algunas de ellas cuentan con saunas y también con aparatos de masaje.
A
los berlineses le gusta navegar por el río, es una de las actividades más
populares. Los turistas también pueden practicar esta actividad, las barcas
para turistas pasan por los canales y hacen un recorrido por los parques y
castillos.
Vida nocturna en Berlín
Berlín
ofrece un amplio abanico de actividades para disfrutar de la vida nocturna.
Sean cuales sean tus gustos, siempre encontrarás algo para hacer.
Tienes
que saber que en Berlín no existen zonas de fiesta como aquí. Existen algunos
barrios o calles donde hay algunos bares de copas pero no están tan
concentrados como aquí.
En
general se respeta bastante el sueño de los vecinos, el silencio de las calles,
por lo que no es frecuente ir de bar en bar toda la noche.
La
vida nocturna en Berlín es muy variada por lo que es importante que decidas qué
quieres hacer y consultes los locales, porque muchos clubes varían de estilo en
función del día de la semana: un día pueden ofrecer música pop y al siguiente
jazz. Es importante que te informes, para ello solo debes consultar internet.
La mayoría de bares y clubes tienen sus sitios webs donde te informarán del
tipo de música, horario del local, el precio de la entrada e incluso la carta
de bebidas.
Antes
de salir es conveniente que elijas a qué local quieres ir y busques
alternativas cercanas por si está lleno y no consigues entrar o por si no te
gusta. De lo contrario puedes perder la noche yendo de un lugar a otro de la
ciudad y sin encontrar algo que te guste.
Berlín
es conocida como la capital mundial del techno. A buena parte de la gente joven
le gusta este género de música electrónica, por lo que es frecuente en muchos
locales. Esto no significa que no puedas encontrar otras alternativas como el
pop, el rock, el jazz, etc. en muchos otros clubes.
La ropa importa
Algunos
bares exigen una ropa determinada acorde con el evento que organicen. Así por
ejemplo, te puede pedir que se vista de forma elegante, o de rockero, o que se
lleve una prenda determinada…
Los porteros y su capacidad de decisión
Muchas
veces son los porteros de las discotecas quienes deciden quien entra o no a la
discoteca en cuestión. En estos casos lo mejor es vestir ropa que no llame
mucho la atención e ir en grupos pequeños y sin armar jaleo.
Los locales clandestinos
Otra
forma de ocio en Berlín es acudir a fiestas clandestinas o secretas.
Son
fiestas en las que se pide una contraseña al entrar, o el local donde se
celebra la fiesta está en un plano de tirada limitada que solo unos pocos
consiguen. La contraseña o el plano se transmite o distribuye de forma
personal. Estas fiestas también se suelen organizar a través de las redes
sociales.
Los precios
Normalmente
se cobra entrada en todas las discotecas y clubes. El precio depende del día,
la fiesta que se organice y dónde esté situado el local. Los precios oscilan
entre 3 euros los más baratos a 14 ó 15 los más caros.
Con
el precio de entrada no se incluye ni la copa ni el guardarropa.
El
precio de las consumiciones también es muy variado: la cerveza suele costar
unos 3 € y la copas a partir de 5 €, aunque depende de cada local.
Una
cosa que es importante conocer es si los vasos o botellas llevan incluido el
“Pfand”, que es una fianza adicional de entre 50 céntimos y 1 euro que te
reembolsan en el bar al devolver el recipiente.
Las propinas
En Berlín y
en toda Alemania es obligatorio dejar propina. No depende, como aquí, de la
decisión del cliente, y tampoco se limita al ámbito de los bares y
restaurantes.
En Berlín es
casi obligatorio añadir a la cuenta el 10% de propina, siempre y cuando te
hayas sentado en una mesa y haya sido atendido por un camarero. Si por ejemplo,
pides un café en la barra, no hay que incluir propina.
¿Qué debes hacer a la hora de pagar?
Cuando te
traigan la cuenta, debes indicarle al camarero cuánto debe cobrar. No dejes la
propina encima de mesa, pues se considera de mal gusto.
Si vas en
grupo, a la hora de pagar, no te sorprendas si el camarero te pregunta si cobra
a escote o a cada uno lo suyo. Es algo muy habitual que cada comensal pague
directamente al camarero.
Propina por utilizar el lavabo
Otro
lugar donde debes dejar propina es en el cuarto de baño. Muchos
establecimientos como centros comerciales o cadenas de comida rápida contratan
personal únicamente dedicado únicamente a mantener limpio los lavabos. Suelen
estar sentados en la entrada y sobre alguna repisa verás un letrero en el que
se indica la propina que hay que dejar, normalmente 50 céntimos, por utilizar
el lavabo.
Consejos para moverse por la ciudad
Cuando
viajes por Berlín es conveniente que lleves dinero encima, en efectivo, porque
algunos locales, incluidos restaurantes, solo aceptan una tarjeta especial
propia de Alemania, la EC-Karte. No aceptan las tarjetas débito o crédito
habituales.
Si
vas a estar unos meses en Alemania es aconsejable ir al banco y hacerse esta
tarjeta. Con ella puedes pagar en los supermercados, las tiendas, las máquinas
expendedoras de billetes, etc.
El
precio del transporte en Berlín es bastante caro. Los billetes sencillos
cuestan más de 2 euros y el abono diario más de 6. También existen otros tipos
de billetes con descuentos, por ejemplo billetes para grupos, para estudiantes,
billetes de fin de semana, etc. Es recomendable visitar el sitio web de
transporte público berlinés e informarte de cuál es el billete que mejor te va.
La dirección es www.bvg.de.
Además
podrás consultar horarios y ver la forma más rápida de llegar a un determinado
lugar.
El
billete te permite viajar en todos los medios de transporte: autobuses urbanos,
metro (U-Bahn), tren urbano (S-Bahn), tren regional dentro de la ciudad,
tranvía, e incluso algunos barcos en determinadas zonas del río Spree.
Normalmente
solo es necesario enseñar el billete al subir al autobús. En el resto de
transporte se accede al vehículo sin pasar por ningún control. Esto no
significa que se pueda viajar sin billete, se hacen controles aleatorios, sobre
todo a las horas y en las líneas más frecuentadas. También en épocas donde es
más habitual utilizar el transporte público (por ejemplo el comienzo del curso
escolar). Debes comprar tu billete y así evitarás una multa.
Recorridos guiados
Si
quieres pasear por la ciudad acompañado de alguien que te cuente detalles
históricos y anecdóticos, puedes acceder a distintos recorridos guiados.
Si
tu presupuesto es un poco ajustado, busca el que mejor se ajuste en “free
tours” organizados por New Berlin (http://www.newberlintours.com) Podrás conocer algunos de los lugares más turísticos
de la ciudad y solo tendrás que pagar el precio que te convenga.
Además
de esta, tienes multitud de alternativas y recorridos. Puedes conocer el Berlín
nazi, el Berlín comunista, el Berlín nocturno, el Berlín más alternativo…
Recuerdos de Berlín
En
Berlín no hay muchísimas tiendas de recuerdos como sucede en otras ciudades de
Europa, pero sí podrás encontrar bastantes en las zonas más turísticas, como
los alrededores de la Alexanderplatz o en el paseo Unter den Linden. Podrás
comprar artículos típicos con el nombre de algún monumento de la ciudad o algún
objeto representativo como camisetas, llaveros, bolsos, platos, vasos, dedales…
Pero
sin duda alguna, un recuerdo exclusivo de Berlín es un trozo de Muro, ya sea
representado en postales o un pedacito en un bote, que viene con un certificado
de autenticidad que prueba su procedencia.
Otro
artículo original son los productos de las tiendas “Ampelmann” (las famosas
figuras de los semáforos de la Alemania Oriental).
Si
prefieres optar por productos alimenticios o bebidas típicas de la región, no
hay una variedad de cerveza propia ni tampoco una salchicha típica de Berlín.
VIAJES
SABED QUE PODEIS VIAJAR A BERLIN DESDE 30 EUROS CON LAS COMPAÑIAS LOW
COST…
BERLIN TIENE TRES AEROPUERTOS
Los siguientes son los aeropuertos con rutas bajo coste de Berlin,
para más información haga click en el nombre del Aeropuerto:
Aeropuerto Berlin - Brandenburg / Schönefeld
Grünbergallee - 12521- Berlin
Código del Aeropuerto: SXF.
Teléfono de Información: 180-5000 186.
Ubicación: 18 Km., del centro de Berlín.
Aeropuerto Berlín - Tegel
Saatwinkler Damm - 13403- Berlin
Código del Aeropuerto: TXL.
Teléfono de Información: 180 500 0186.
Ubicación: 8 Km. del centro de Berlín.
Aeropuerto Berlín - Tempelhof
Tempelhofer Damm 1- 12101- Berlin
Código del Aeropuerto: THF.
Teléfono de Información: 180 500 0186.
Ubicación: 6 Km. del centro de Berlín.
Un viaje en taxi desde el Aeropuerto a la zona del Centro-Oeste de
Berlin:
de Aeropuerto Tegel: dura 15 - 25 minutos
de Aeropuerto Tempelhof: dura 15 - 20 minutos
Lecturas recomendadas:
Sombras sobre Berlín,
Volker Kutscher, Ediciones B.
El diario de Anna
Frank, Anna Frank.
Antes del diluvio, Otto Friedrich. Plaza & Janés
La dama de
Berlín, Dan Frank. Seix Barral.
No hay cielo sobre
Berlín, Helga Schneider.
Editorial Salamandra.
Infancia en Berlín
hacia 1900, Walter Benjamin. Alfaguara
Berlín: después del
Muro. Antología, Jurgen Becker. Fondo
de Cultura Económica de España.
El muro: crecer bajo
el Telón de Acero, Peter Sis. Norma
Editorial, S.A.
Diplomacia. Henry Kissinger. Ediciones B
Historia del Tercer
Reich, Willem Shirer, Océano
Holocausto, Gerald Green.
Plaza & Janés.
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